La operación, que ha llevado a la detención de varios delincuentes que habrían realizado robos en diferentes salas de Bingo de Canarias y Galicia, ha estado coordinada por las fuerzas de seguridad españolas.
Gracias a un excelente trabajo conjunto entre la Guardia Civil y la Policía Nacional, han sido puestos a disposición judicial los componentes de una banda criminal que supuestamente se dedicaba a robar en diferentes negocios. Los malhechores, que actuaban tanto en Gran Canaria, como en Las Palmas e incluso Pontevedra, tenían como principal objetivo los salones de Bingo.
El inicio del operativo por parte de la Guardia Civil se activa en octubre del año pasado, cuando tres de los implicados atracaron de forma violenta a un trabajador de un salón de juegos de azar para hacerse con las llaves maestras de varias máquinas. Este hecho, junto con el aumento de hurtos en diferentes salones de juegos y Bingos, puso en alerta al cuerpo de seguridad del Estado, que sospechó de la ejecución de nuevos robos en este tipo de establecimientos en un futuro cercano.
La Guardia Civil, gracias al trabajo coordinado con otras agencias de seguridad, pudo comprobar que la Policía Nacional ya estaba siguiendo la pista de este grupo de bandidos que congregaba a varias personas, todas ellas con antecedentes criminales. A partir de ese momento, ambos cuerpos se unieron para formar un operativo de mayor calado y recursos, que tenía como único objetivo acabar con las actuaciones de la banda y detener a todos los implicados.
Como si de la serie Narcos de Pablo Escobar se tratara, los delincuentes usaban diferentes métodos de contravigilancia para evadir el seguimiento policial, lo que hizo que la investigación se convirtiera en una ardua tarea. En este sentido, la banda estuvo usando múltiples teléfonos móviles, tarjetas sim y vehículos, lo que alargó el proceso de captura.
Finalmente, gracias al intercambio de información entre la Guardia Civil y la Policía Nacional, las diferentes conversaciones con supuestos testigos y el seguimiento de robos de similares características, se pudo llegar a la ubicación de los inmuebles donde los bandidos escondían el botín obtenido en cada uno de los golpes.
Los integrantes de la banda se encuentran actualmente a disposición judicial y se le imputa alrededor de cincuenta delitos relacionados con robos con fuerza en diversos establecimientos de Canarias y Galicia.