888 cambiará su nombre por el de Evoke con el objetivo de renovar su imagen de marca y poner fin a un agitado 2023 que ha hundido la cotización de sus acciones.
Además de este cambio de nombre, la entidad también pretende poner una mayor atención a sus principales mercados, que suponen el 85% de sus ingresos y que incluyen a Reino Unido, Italia, España y Dinamarca. Asimismo, tratará de implementar medidas de ahorro que le ayuden a mejorar sus números de 2023.
Per Widerström, veterano del sector del juego online que asumió el cargo de consejero delegado de 888 el pasado mes de octubre, trata de reanimar la fortuna de un grupo endeudado que se ha visto asolado económicamente en los últimos 18 meses por fallos en el cumplimiento de la normativa y errores en la gestión.
El cambio de nombre reflejará mejor la fortaleza del modelo operativo multimarca del grupo y su visión y misión de hacer la vida más interesante, deleitando a los jugadores con experiencias de juego y apuestas de primera clase.
888, que cotiza en bolsa, también se ha visto presionada en la reducción de la deuda que contrajo para financiar la adquisición en 2021 de las operaciones internacionales de William Hill.
En cualquier caso, los cambios de marca siempre conllevan un riesgo. Por ejemplo, el grupo de gestión de fondos Standard Life Aberdeen fue objeto de burlas por acortar su nombre a Abrdn en 2021, mientras que Royal Mail acabó dando marcha atrás en su decisión de cambiar de marca a Consignia.
Junto con el cambio de nombre, que requerirá la aprobación de los accionistas de la firma, 888 estableció nuevos objetivos financieros, entre los que se encuentran aumentar los ingresos entre un 5% y un 9% al año a medio plazo y reducir su apalancamiento para 2026.
James Wheatcroft, analista de Jefferies, afirmó lo siguiente a este respecto:
Los nuevos objetivos se sitúan ligeramente por encima de las estimaciones de consenso. Se ha producido un cambio radical en la urgencia de 888 por posicionar el negocio para el éxito a largo plazo desde que Widerström fue nombrado consejero delegado.
